Por Roxana Celeste Dib
El Acuerdo por la Educación 2024, fue presentado en la Noche de la Educación 2024, donde participaron figuras claves del ámbito político y educativo; entre ellos, los gobernadores Alfredo Cornejo (Mendoza), Raúl Jalil (Catamarca), Leandro Zdero (Chaco), Marcelo Orrego (San Juan), Claudio Poggi (San Luis), Carlos Sadir (Jujuy), y Alberto Weretilneck (Río Negro). También asistieron el Secretario de Educación de la Nación, Carlos Torrendell, el senador Wado De Pedro, y los diputados Sabrina Ajmechet, Maximiliano Ferraro, y Santiago Santurio. Además, estuvieron presentes Facundo Moyano, Mariano Narodowsky, Guillermina Tiramonti, y Mario Oporto. Estas personalidades aportaron su experiencia en la discusión sobre los desafíos del sistema educativo argentino, centrando el debate en las prioridades de este, que busca mejorar la calidad, equidad y gestión educativa a nivel nacional y provincial.
Este Acuerdo está enfocado en la mejora educativa en Argentina y tiene un impacto significativo en nuestra provincia de Salta; el mismo propone una serie de puntos claves que buscan transformar el sistema educativo de manera estructural, comenzando con la universalización del nivel inicial. En Salta, esta medida es esencial, ya que muchas zonas rurales carecen de acceso a salas para niños de tres años, lo que limita las oportunidades educativas desde la infancia. Garantizar el acceso a la educación desde esa temprana edad es crucial para sentar las bases del aprendizaje y optimizar las trayectorias educativas a largo plazo.
Otro eje fundamental del Acuerdo es la alfabetización en los primeros años de primaria. Según los datos del informe Aprender 2023, el 30% de los estudiantes en Salta no alcanzan los niveles mínimos de comprensión lectora. Esta situación refleja la urgente necesidad de mejorar la calidad de la enseñanza de la lectoescritura, tanto en áreas urbanas como rurales. El Acuerdo propone fortalecer la formación docente en estrategias de alfabetización y asegurar que los recursos didácticos sean accesibles en toda la provincia, buscando reducir las disparidades existentes.
En el nivel secundario, el Acuerdo subraya la importancia de acompañar las trayectorias educativas y asegurar la terminalidad escolar. En Salta, la deserción escolar es un problema crítico, especialmente en zonas alejadas. De cada 100 estudiantes que ingresan a la primaria, solo una fracción logra completar la secundaria en el tiempo previsto. Esta falta de terminalidad limita las oportunidades de los jóvenes para integrarse al mundo laboral o continuar con estudios superiores. El Acuerdo propone medidas para asegurar que los estudiantes permanezcan en la escuela, mejorando la calidad de la enseñanza en materias clave como Matemática y Lengua.
El fortalecimiento de la gobernanza educativa es otro punto clave. En un contexto federal como el de Argentina, la coordinación entre Nación y provincias es vital para garantizar que las políticas educativas se implementen de manera efectiva y equitativa. En Salta, donde las realidades locales varían considerablemente entre áreas urbanas, rurales aglomeradas y rurales dispersas, una superior asignación de recursos puede ser decisiva para mejorar el sistema educativo. El Acuerdo propone establecer metas educativas claras que permitan monitorear los avances y ajustar las políticas en función de los resultados obtenidos.
La inversión educativa es uno de los ejes más relevantes del Acuerdo. Propone garantizar una inversión mínima del 6% del PBI, un objetivo establecido en la Ley de Financiamiento Educativo, pero que ha sido difícil de cumplir en algunas provincias. En Salta, esta inversión es especialmente necesaria para mejorar la infraestructura escolar, garantizar la capacitación continua de los docentes y proporcionar materiales educativos adecuados, en especial en las comunidades más vulnerables.
Otro aspecto fundamental es la mejora en la gestión escolar. En Salta, muchas escuelas enfrentan una falta de personal, lo que afecta directamente la calidad de la enseñanza. El Acuerdo propone reducir la carga administrativa que enfrentan los directores y docentes, permitiendo que se concentren en las tareas pedagógicas. Además, se sugiere implementar una carrera directiva que permita a los directores avanzar en su formación y desarrollo profesional, lo que mejorará la gestión de las escuelas y, por ende, los resultados educativos.
La ampliación de la jornada escolar es otra de las propuestas del Acuerdo, que busca robustecer los tiempos y las condiciones para el aprendizaje. En Salta, algunas escuelas comparten edificios, lo que hace desigual esta posibilidad. Aumentar el tiempo efectivo en el aula, combinado con una mejora en la infraestructura escolar, podría generar un cambio significativo en la calidad de la educación. Además, garantizar los 190 días efectivos de clase es un desafío constante en la provincia.
Otro aspecto fundamental del Acuerdo por la Educación 2024 es la producción de información y evaluación educativa. El Acuerdo destaca la importancia de contar con sistemas de evaluación sólidos y precisos que permitan medir el desempeño de los estudiantes, docentes y escuelas de manera continua. En Salta, mejorar los mecanismos de recolección de datos y evaluación es clave para ajustar las políticas educativas en función de los resultados obtenidos y asegurar que las iniciativas implementadas generen el impacto esperado. Un sistema de evaluación eficiente facilitaría la toma de decisiones basada en evidencia y permitiría realizar un seguimiento detallado del progreso en la calidad educativa a nivel provincial.
La formación docente también es un eje central del Acuerdo. Este propone no solo mejorar las condiciones salariales de los docentes, sino también fortalecer la formación inicial y garantizar una actualización continua a lo largo de la carrera. Esto permitiría que los maestros estén preparados para enfrentar los desafíos actuales del sistema educativo, como la alfabetización digital y el uso de nuevas tecnologías en el aula, asegurando el acceso a internet en todas las escuelas de la provincia.
Por último, el Acuerdo enfatiza la revisión de los contenidos curriculares para asegurarse de que respondan a las demandas del mundo actual. En Salta, donde muchas comunidades rurales tienen necesidades educativas particulares, adaptar los contenidos a las realidades locales y preparar a los estudiantes para un entorno globalizado es esencial. La alfabetización digital y la formación ciudadana son dos áreas clave que deben fortalecerse en el currículo, garantizando que los estudiantes salteños estén preparados para enfrentar los desafíos del siglo XXI.
El Acuerdo por la Educación 2024 es una gran oportunidad para transformar el sistema educativo en la provincia de Salta. Al implementar estas prioridades, se busca cerrar las brechas educativas, mejorar los aprendizajes y garantizar que todos los estudiantes, independientemente de su origen o situación socioeconómica, tengan acceso a una educación de calidad que les permita desarrollar su máximo potencial.
